Dirigida por Taika Waititi, ‘Thor Ragnarok’ supone la tercera entrega en solitario del personaje, y un punto de inflexión antes de su próxima reunión con el resto de Vengadores en ‘Infinity War’. En esta ocasión, se ha optado por un cambio de tono tanto en la narrativa, como en el personaje mismo, para diferenciarlo de unas entregas anteriores que no terminaron de calar en el público ¿Habrá funcionado?
En 'Thor: Ragnarok' de Marvel Studios, Thor está preso al otro lado del universo y se enfrenta a una carrera contra el tiempo. Su objetivo es volver a Asgard y parar el Ragnarok porque significaría la destrucción de su planeta natal y el fin de la civilización Asgardiana a manos de una todopoderosa y nueva amenaza, la implacable Hela.
Si en la primera Thor, brillaba la solemnidad y ese aire a tragedia Shakesperiana muy acorde con el estilo de su director, Kennet Branagh; y en el ‘Mundo Oscuro’, se optó por implementar un humor que quizá el personaje necesitaba pero que no terminaba de cuajar, aquí se asiste a un festival muy auto paródico que termina de desmelenar del todo al Dios del Trueno.
En este sentido, y aunque no lo parezca, esa auto parodia, esa caída constante en el chiste fácil, hace de ‘Thor: Ragnarok’ la película más divertida de la trilogía. Esto, por el contrario, deriva en quizá una pérdida de seriedad para con algunos momentos del film que claramente si necesitaban más dramatismo e incluso épica. Aun así, se agradece que sigamos viendo una evolución clara y natural en los personajes.
Thor, Hulk Valkiria y Loki, tienen sus minutos y pese al vaivén constante de sucesos y chistes, sorprendentemente gozan de un desarrollo destacable. Thor sufre un cambio profundo en su propia idiosincrasia muy interesante y necesario. Hulk, que no Banner, tiene los minutos necesarios para entender más su figura y las motivaciones que le llevan a estar ahí, Loki sigue desmelenado y se agradece que la relación entre hermanos siga desarrollándose de una manera natural y acorde a lo que se esperaba, y Valkiria, sin desvelar nada es la gran sorpresa, es quizá el personaje más interesante y lleno de matices de todo el film.
Los villanos, están a la altura de las circunstancias, pero no se salen del arquetipo de siempre, Cate Blanchett esta correcta en su papel de Hela, pero no aporta nada que la diferencie de demás villanos que hayamos visto ya. En este sentido Grandmaster, interpretado por Jeff Goldblum se desmarca son sus excentricidades y su mala baba, casa más con el tipo de película que Waititi nos presenta. El resto de secundarios aportan más diversión e incluso algunos momentos memmorables como en el caso del personaje interpretado por el propio Waititi, Korg.
‘Thor: Ragnarok’, destaca por su diversión y por sus escenas de acción muy bien implementadas y coreografiadas. Los efectos especiales y su concepción como road movie mezclada con tintes de ‘Guardianes de Galaxia’, es un punto interesante que la hace distanciarse de lo visto anteriormente del personaje, tanto en solitario como en crossovers. Solo su falta de seriedad para con algunas escenas que claramente necesitaban del dramatismo y la épica que se requiere, lastran la que, por otro lado, es la mejor aventura en solitario del Dios del Trueno, y el film más auto paródico de Marvel Studios.
NOTA: 7.0
Por Joaquín Muñoz (@JoaquinMGLoL)
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