-

23 de julio de 2014

[CRÍTICA] “El Amanecer del Planeta de los Simios”, Vine, vi y vencí


“El Amanecer del Planeta de los Simios” supone la segunda parte de la notable precuela de 2011 de “El Planeta de los Simios”. Una segunda “precuela” comandada por Matt Reeves (director de “Monstruoso” y el remake americano de “Dejame Entrar”), que no sólo mantiene la buena calidad de su predecesora, sino que en algunos momentos la amplía y mejora, haciéndola una secuela justificada y que completa y complementa a su primera parte y a la original del 68.


Mientras que “El Origen del Planeta de los Simios”, hilaba de manera respetable con el clásico original del 68 contando el origen de todo y de cómo unos simios podían llegar a suponer un peligro para la humanidad, haciendo una profunda crítica a la experimentación con animales; en esta segunda parte, situada 10 años después y donde la población humana ha quedado bastante diezmada por el virus “Simio”, se profundiza en ese comienzo de la Revolución simiesca. Una Revolución, que lejos de ser contada meramente con escenas típicas de blockbuster, se centra más en la narrativa, en esa triple relación entre humanos- humanos, humanos-simios y simios-simios, donde conceptos como la familia,  futuro, diplomacia, humanidad y paz, conforman la idiosincrasia de la película y que invita a la reflexión pretendida en el espectador.

Además, se centra muy bien en como narrar la evolución tanto de los humanos, como de los simios, los primeros, desesperados por recuperar lo que saben que ya no podrán tener, su modo de vida anterior, cómodo y nada primitivo donde buscar una fuente de energía eléctrica es lo principal. Y en los simios, vemos una evolución hacia la adaptación, el aprovechamiento del medio, y en cierta manera, incluso un mayor grado de civilización. Es en este punto donde ambos bandos coincidirán y se desarrollará la historia.

Una historia, donde las motivaciones y anhelos de ambos bandos se entienden, haciendo que el espectador no consiga posicionarse por ninguno de los dos , siendo la “Paz” lo que se anhele en todo momento. Una película mucho más profunda de lo que parece en un principio y que merece la pena ver, con un ritmo constante, donde acción y narración están muy bien equilibrados.

Destacar también el papel de Andy Serkis (César), que se come la pantalla y al resto del reparto cada vez que hace su aparición “digitalizada”, algo, que ya demostró en la primera parte y en papeles como el de Gollum en “El Señor de los Anillos” o el de King Kong en el remake de 2005.

En definitiva, una película muy cuidada y elaborada, con un guión que lejos de ser original, está muy bien construido, donde emoción, acción y reflexión se conjugan de manera notable y con una mejora de la técnica evidente y lógica, que ambienta uno de los mejores blockbuster para ver este verano en pantalla grande.

NOTA: 7.75
Por Joaquín Muñoz

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...

2 comentarios :

  1. Peliculón, al nivel de la primera. La perfección que están alcanzando los efectos digitales es sorprendente.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Si, la verdad es que ya la primera parte sorprendía en ese aspecto, y esta segunda consigue que realmente disfrutemos todavía más de la interpretación de los actores que hacen de simios, muy recomendable =)

      Eliminar